Las elecciones de Ecuador 2025 están llegando a su punto culminante con una reñida segunda vuelta entre Daniel Noboa y Luisa González, dos candidatos que, según analistas, podrían definir el resultado con una diferencia mínima. La contienda, prevista para el 13 de abril, promete ser una de las más ajustadas en la historia democrática del país.
A pesar de que temas como la dolarización, la campaña territorial y el uso de redes sociales han dominado la campaña, se espera que el impacto de estos factores disminuya en las últimas semanas. Los expertos coinciden en que la clave de la elección podría depender de elementos imprevistos.
Henry Cucalón, excandidato presidencial, asegura que la administración de Noboa en estos días será crucial. Si comete errores, Luisa González podría sacar ventaja. En cambio, si el actual presidente evita fallos, el correísmo perdería terreno. Mientras tanto, Augusto Barrea, exalcalde de Quito, destaca que el desafío para ambos candidatos será lograr superar la polarización actual y presentar una propuesta sólida de futuro para el país, centrada en la seguridad y el empleo.
Por su parte, la analista Pamela Troya advierte que la falta de una estrategia inclusiva podría jugar en contra de ambos candidatos. Según ella, la polarización ha dejado de lado sectores sociales importantes, lo que podría impactar el resultado final.
El debate reciente no arrojó propuestas innovadoras, pero consolidó el apoyo de los más de 4 millones de votantes que ambos candidatos ya habían obtenido. Ahora, el enfoque está en captar los 2,2 millones de votos restantes. Con un margen tan estrecho como el de la primera vuelta, en la que solo 17,000 votos separaron a los dos, los analistas piden a los candidatos que respeten el resultado para evitar una crisis social.